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jueves, 10 de octubre de 2024

Reivindicación desde el programa soy mayor y decido

 

El Mundo rural menos poblado reclama el reconocimiento de espacios comunitarios para el apoyo al envejecimiento activo. Ser menos no resta derechos.

Colectivos de Acción Solidaria (CAS), entidad del tercer sector constituida hace 35 años por diferentes asociaciones implantadas principalmente en el medio rural de diversas comunidades autónomas del Estado español, lleva años trabajando por una trasformación social efectiva que reconozca las particularidades de entornos rurales menos poblados, adaptando las normativas a estas particularidades y dotando de recursos para salvar los desequilibrios territoriales.

Por poner un ejemplo significativo, si ponemos el foco en el servicio de “centro de día” para personas mayores que menciona la Ley de dependencia, sería inviable cumplir la norma.

En este sentido, proponemos la creación de otro tipo de centros, además de los ya dispuestos como centros asistenciales, que podríamos llamar “centros rurales comunitarios”. Estos centros estarían enfocados a la prevención de la dependencia y ofrecerían servicios socio-comunitarios para dar respuesta a otras necesidades de las personas mayores distintas de las asistenciales, tales como las de envejecimiento activo, socialización y participación comunitaria.

Reivindicamos centros rurales comunitarios para pequeñas zonas dentro de cada comarca que incidan en una mejora de la salud y de la vida comunitaria.

Reivindicamos centros rurales comunitarios porque facilitan las relaciones, socialización, comunicación y haciendo frente al problema de la soledad no deseada y el aislamiento.

Reivindicamos centros rurales comunitarios porque potencian la participación intergeneracional y entre pueblos, fortaleciendo comunidades vivas.

Reivindicamos centros rurales comunitarios porque favorecen la creación de empleo profesional cualificado, permitiendo el asentamiento de mujeres, personas jóvenes y nueva población.

Reivindicamos servicio de transporte para acceder a estos centros comunitarios y así cubrir la necesidad de cada localidad por pequeña que sea.


Reivindicamos centros rurales comunitarios porque ayudarán a cambiar la percepción del mundo rural, de manera que sea visto como espacio amigable para las personas mayores y lugar de oportunidades en el ámbito de los cuidados.

Reivindicamos financiación para la creación, articulación y desarrollo de esta red de espacios a través de una colaboración público-privada, que incluya a los ayuntamientos y entidades del tercer sector implantadas en el territorio, necesaria para hacer realidad lo propuesto por el artículo 16 de la Ley 39/2006 de Promoción de la Autonomía personal y Atención a las personas dependientes.

Son muchas las actividades y servicios que se pueden prestar de manera coordinada para prevenir el envejecimiento tales como terapia ocupacional, estimulación cognitiva, psicomotricidad, gerontogimnasia, fisioterapia, podología, servicios de proximidad de comida y comida a domicilio, información y asesoramiento, talleres intergeneracionales de saber tradicional y trasmisión de la memoria, etc.

Este modelo es posible, puesto que ya existen experiencias piloto en Cantabria y más consolidadas en País Vasco con los centros rurales de atención diurna (CRAD) y algunas experiencias más aisladas que hemos ido poniendo en marcha, supliendo los escasos recursos con una gran dosis de compromiso social, en otras comunidades como Castilla y León.




sábado, 5 de octubre de 2024

La Revuelta de la España Vaciada, en defensa de la sanidad pública.

 

Escuelas Campesinas de Salamanca y Colectivos Por un mundo Rural y Urbano Vivos se adhieren a la reivindicación de una sanidad pública integral y de calidad en el medio rural

 


La Revuelta de la España vaciada pide una sanidad integral para el medio rural

La Revuelta de la España vaciada inicia, a partir del próximo sábado día 5, su semana de acciones en defensa de la sanidad pública rural, en el marco de las reivindicaciones del Yo paro por mi pueblo, que desde 2019 ha venido celebrando en los primeros días del mes de octubre.

En esta ocasión, se vuelve a poner el foco en la problemática en la sanidad pública, especialmente en la atención primaria rural, cuyo deterioro se ha visto agravado por la pandemia y por las políticas de los últimos años, que optaron por el desvío de recursos desde la sanidad pública a la sanidad privada y el desmantelamiento paulatino de lo público.

Entre los problemas concretos que señalan, se encuentran los recortes en las plantillas de personal sanitario (supresión de plazas, falta de cobertura a las bajas, o la no sustitución de los sanitarios en los descansos por guardias o por vacaciones), lo cual lleva a la supresión de días de consulta de manera habitual en muchos pueblos, a que se abandone la práctica de la sanidad preventiva, con los programas de promoción de la salud y el bienestar personal, a que el consultorio no abra en una o varias semanas consecutivas, con todo lo que ello supone para las personas mayores, con dificultades de movilidad o sin apoyos para buscar una alternativa, o a que no se puedan atender las emergencias.

Por todo ello, la Revuelta de la España vaciada demanda una sanidad pública de calidad, dotada con recursos y personal suficientes para que los territorios de la España vaciada no continúen despoblándose aún más, y que garantice a todas las personas el desarrollo de este derecho social independientemente del lugar donde residan.

De manera concreta, el manifiesto que se leerá en las plazas y a la puerta de los centros de salud este año, se centra en diez reivindicaciones que son exigencias comunes a todos los territorios que sufren la despoblación: un aumento de la asignación a la Atención primaria hasta alcanzar el 25% del total del presupuesto de Sanidad; que los centros de salud y consultorios rurales estén accesibles a la población y abiertos en todas las localidades; la eliminación y reducción de las listas de espera en la atención especializada; la priorización de las consultas presenciales, empleando las telefónicas para temas puramente burocráticos; una adecuación y complementación de las plantillas de los centros de salud, adaptándolas a las características de cada territorio y dotándolas de los especialistas necesarios en pediatría, geriatría y otras posibles especialidades.

Asimismo, también se pide a las administraciones, el fomento de la sanidad preventiva y la educación para la salud, con actuaciones concretas; el fortalecimiento de la participación ciudadana con el correcto funcionamiento de los Consejos de salud; la creación de una especialidad en medicina rural o, al menos, la posibilidad de habilitar un sistema de prácticas en centros de salud rurales para los profesionales que vayan a trabajar en el medio rural; la mejora de los servicios de emergencias con la dotación de ambulancias medicalizadas, helicópteros diurnos y nocturnos u otros recursos necesarios; y, por último, cumplimiento del criterio del 100/30/30 por el que ha abogado la Revuelta de la España vaciada y recogido en el Modelo de desarrollo (una conectividad a internet de al menos 100 megas, que los servicios básicos, estén a menos de 30 minutos de desplazamiento en coche y que el acceso a una vía de alta capacidad no sobrepase los 30 kilómetros), de ahí el lema “Salud sin distancia”. Es una cuestión de justicia social, ya que ser pocos no resta derechos.

Desde el sábado, y a durante las próximas semanas, se llevarán a cabo las concentraciones en las puertas de los centros de salud y en las plazas, a lo que se unirá una campaña informativa en redes y el apoyo a aquellas otras movilizaciones que se convoquen en todo el territorio en torno a la temática sanitaria.